Conservación
Una de las funciones que debe cumplir un archivo es la tarea de conservación. Cuando hablamos de ello, nos referimos al cuidado de los documentos y las acciones destinadas a prolongar la vida útil de un objeto.
Partiendo del conocimiento del material que estamos tratando en el CDM, se elaboran estrategias posibles para llevar adelante acciones de conservación. Una vez que se cuenta con el lugar de ubicación de los materiales y el espacio de trabajo del personal, se acondiciona el ambiente y las instalaciones para ello:
– control de la temperatura y la humedad ambiente
– distribución y diferenciación de los espacios utilizados
– regulación de las entradas de luz natural o factores climáticos externos
– empleo adecuado de la iluminación artificial
– limpieza diaria del ambiente con los debidos materiales y productos indicados para ello
– protección del ingreso de insectos varios y roedores
– establecimiento de condiciones de seguridad de los materiales.
Las acciones que se realizan para la conservación son las siguientes:
– eliminación del polvo de la documentación en forma regular
– tratamiento y manipulación de los materiales utilizando los utensilios adecuados
– limpieza de hongos y reparación de daños causados por microorganismos o insectos
– colocación en cajas de cartón libres de ácido de documentación en soporte papel.
Restauración
La restauración consiste en la recuperación de la integridad física y funcional de los documentos mediante técnicas que corrigen las alteraciones sufridas. Con el paso del tiempo, los materiales se han visto dañados, y la restauración permite la devolución de su valor documental.
En el CDM, se realizan algunas tareas de restauración de los instrumentos de trabajo, básicamente grabadores-reproductores de sonido del musicólogo Lauro Ayestarán.